Durante tres días en esta ciudad de La Mancha puedes escuchar historias a cualquier hora del día y de la noche. Ininterrumpidamente se suceden narradores aficionados y profesionales, grupos de amigos, abuelas con nietos, tímidos, lanzados... Imaginad un encuentro de este calibre para los amantes de los cuentos. Parece una locura, ¡pero sin duda es una locura deliciosa!
El público de Guadalajara está acostumbrado a oír cuentos y a disfrutar de grandes cuenteros del panorama nacional e internacional (ya van por el dieciocho maratón). Junto al edificio principal que da cabida a la mayor parte de las actuaciones hay un mercadillo de libros. Es una interesante muestra de cuentos para todos los gustos. Algunos de ellos son verdaderas rarezas, otros tienen magníficas ilustraciones, otros están descatalogados. Algunos son verdaderas joyas de papel. Volví a casa con todo un cargamento...
Ya estoy deseando volver el próximo año a disfrutar de las muchas actuaciones y narraciones que seguro se sucederán. ¡A vivir unos días de cuento!
No hay comentarios:
Publicar un comentario